ARTE GRIEGA

ARQUITECTURA


La medida, la proporción y la armonía, junto con la funcionalidad, son los sellos que definen esta arquitectura.
La piedra con sillares bien labrados y, en menor medida, el ladrillo, y como decoración el mármol fueron los materiales predilectos de los griegos.



Según cómo se coloquen las columnas, el templo se llama de distinto modo:


Tenían siempre en las fachadas principales un número de columnas par, y dependiendo del número de columnas se llaman de distinta manera:
Tetrástilo (cuatro).
Hexástilo (seis).
Octóstilo (ocho).
Decástilo (diez).
Dodecástilo (doce).
Otras denominaciones:
Hipetro, sin techo.
Pseudoperiptero, con columnas adosadas en los lados.
Aptero, al templo sin columnas.


El templo es la construcción más compleja. Tiene una planta rectangular, aunque también puede ser circular, y en él se distinguen: el pronaos, o vestíbulo; la naos, donde se sitúan las imágenes del dios al que está dedicado; y el opistódomos, la parte trasera del templo.


La arquitectura griega es de estilo arquitrabado; en la que se distinguen tres órdenes clásicos fundamentales: el dórico, el jónico y el corintio. Estos son, en realidad, órdenes de proporciones entre la altura y la sección.





PINTURA


Con anterioridad a la formación del arte griego hubo en territorios de la antigua Grecia un arte que se ha llamado prehelénico, conservadas tan sólo en ruinas de edificios de la época y sobre estuco, representando paisajes, acciones guerreras y ceremonias cortesanas o religiosas cuyas figuras aunque imperfectas revelan notable expresión y vida. En las decoraciones de vasijas se presenta raras veces la figura humana y siempre estilizada y de escasos detalles.


En cuanto a la pintura griega, su celebridad y la de sus artistas se debe casi por entero a los antiguos historiadores pues no se conserva de ella ni un solo cuadro ni se conoce obra alguna de los famosos considerados desde la antigüedad los pintores por antonomasia
Las obras pictóricas griegas que al presente se conocen y conservan consisten únicamente en decoraciones de ánforas y de otras elegantes vasijas salvo algunos mosaicos de pavimento y placas de arcilla pintadas y sin contar las obras de pintura romana en que intervino mano griega
Consta, no obstante, que los griegos pintaron cuadros excelentes, por lo menos murales (cuyas copias pueden ser algunas decoraciones de las grandes ánforas de lujo) y que emplearon los procedimientos al fresco, al encausto, al temple y quizás al óleo.
Los asuntos representados en tales pinturas fueron escenas de la vida humana y tradiciones o leyendas mitológicas y heroicas.


La pintura griega se divide en tres periodos (después del cretense y micénico ya nombrados que pueden considerarse como protohistóricos respecto de Grecia)a saber:
El de formación y arcaico que dura hasta el siglo V a. C.,
El de elegancia nacional, durante el siglo V a. C. y parte del IV a. C.
El alejandrino o de difusión desde mediados del siglo IV a. C. hasta dos siglos más tarde en que fue Grecia conquistada por los romanos.

ESCULTURA


La escultura de la Antigua Grecia alcanzó el ideal de la belleza artística hasta donde pudo llegar por sí solo el ingenio humano. Aunque Grecia floreció en todas las Bellas Artes, ninguna le distingue tanto como la escultura.
Cultivó el arte de la Antigua Grecia todos los géneros de escultura, adoptando con predilección el mármol y el bronce como material escultórico y tomando como asuntos principales los mitológicos y los guerreros a los cuales añadió en su última época el retrato de personajes históricos.
Forman su característica en los mejores tiempos del Arte (los de Fidias) la expresión de la realidad idealizada, la regular proporción orgánica, el alejamiento de lo vago y monstruoso, la precisión en los contornos y detalles, la armonía y belleza en las formas y la finura en la ejecución.

División de la escultura

1. El período de formación, desde aproximadamente el 620 a. C. al 540 a. C.


2. El período arcaico, desde el 540 a. C. al 460 a. C.

3. El período de perfección o clásico, hasta finales del siglo IV a. C.


4. El período de difusión, que algunos llaman de decadencia, después de Alejandro Magno hasta la conquista de Grecia por roma, de 323 a. C. a 146 a. C.